Barcelona en femenino
Estaba ansiosa por verlas. El año había sido difícil para las tres, especialmente para mi mamá, así que este, su primer viaje a Europa estaba cargado de expectativas.
Viajar, estaba científicamente comprobado -por mí-, puede mejorar cualquier situación: ayuda a colectar los pedacitos de un corazón roto, a despejar la mente de los dramas cotidianos, a cambiar el enfoque automático de nuestra mente, nos da el empujoncito para que decidamos cerrar círculos y por supuesto, nos inspira a imaginar nuevos comienzos...
Cuando las encontré esperando por mí, sentadas en sendas maletas, en uno de los estacionamientos del aeropuerto de Barcelona, tuve que correr a su encuentro,
no cabía duda, hogar es en dónde está el corazón
y en ese instante, mi hogar estaba en Barcelona, junto a ellas 💖
Yo sugerí elegir un sólo país y visitar varias ciudades. Ciertamente la sugerencia no fue bien recibida, y yo no insistí. ¿Quién era yo para decidir sobre su primer viaje al viejo continente? Yo las entendía, y moría por ver su emoción!
No sé si les pase a todos, ciertamente me pasó a mí y sé de algunas amigas que también lo han vivido. En tu primer viaje a Europa, además de ver los íconos del continente, quieres visitar tantos lugares como sea posible ¿Qué más da que sólo visites una ciudad por país? ¿Que tengas de dormir en autobuses y correr para alcanzar el transporte que te llevará al siguiente destino? Lo único que quieres es explorar. ¿Dormir? ya tendrás tiempo cuando mueras! 😆
***
¡Oh, Barcelona! ¿es que alguna vez me recibirás con buen clima? La vez anterior había sido un poco, fría, un poco nublada, pero nada terrible. En esta ocasión, nos recibió lloviendo y nos despidió de la misma manera, ¿qué se le iba a hacer?
Esta no es más que un pequeño recorrido visual por las principales atracciones que visitamos en dos días grises en Barcelona. La verdad es que no nos podemos quejar 😉
* Caminar ir de compras por el Paseo de Gràcia
Debo admitirlo. Uno de los aspectos más reconfortantes de viajar sólo con mujeres es que puedes ir de compras -aunque no compres nada y sólo pases un buen rato mirando chucherías-, sin sentirte presionada, pues puedes estar segura que todos los miembros de la expedición están disfrutando la experiencia 👜
Como lo dije, tampoco es que nos sobrara el dinero, sobre todo considerando el tipo de cambio de pesos a euros, pero unos cuantos chocolates de casa Amatller -que además de deliciosos, tienen los empaques más hermosos!- no le hacían daño a nadie 🍫
Por supuesto, también vimos las afamada casa Batlló y la Perrera, de Gaudí, pero el precio de la entrada y el tiempo limitado que teníamos en la ciudad nos hizo decidir que una mirada exterior sería suficiente
-Y por supuesto, aún teníamos que visitar el Corte Inglés y Mango, jajajajajajaja, que se entiendan las prioridades, jajajajaja-
* Intentar y fallar visitar la Sagrada Familia
¡Dos veces fuimos hasta ella y dos veces no pudimos entrar!
En la primera ocasión que visité la Sagrada Familia quedé tan embelesada que la declaré mi templo favorito por siempre y para siempre ⛪😍, así que por supuesto que quería compartir algo que tengo en tan alta estima con mis más grandes amores, pero no fue posible 😢
El primer día lo intentamos e inclusive nos unimos a la fila, sólo para escuchar después de unos minutos que los boletos estaban agotados.
Nos recomendaron comprarlos online o ir otro día muy temprano y ver si había algo disponible. Ninguna de las opciones anteriores funcionaron. Todo estaba agotado, lo que fue extraño, dado que la vez anterior que la visité no hubo ningún problema, ni siquiera recuerdo haber hecho fila para entrar... será la diferencia entre ir a finales de marzo o a principios de mayo? misterio sin respuesta.
De cualquier forma, el exterior de la Sagrada es espectacular, así que no fue tiempo completamente perdido.
Un poco de arte urbano para el intermedio, mientras caminamos al siguiente destino 😉
*Mojarnos en Park Güell
Otra belleza que nos hizo regresar a ella. La primera vez los boletos de entrada también estaban agotados por ese día, así que recorrimos la parte superior, esa que es abierta al público y desde la cual se observa toda Barcelona, hasta el Mediterráneo... cuando no está nublado, jajaja
Ese mismo día compramos los boletos online para ser las primeras la mañana siguiente. La lluvia fue inclusive más fuerte, pero hey!, teníamos el parque casi para nosotras solas!
-Hay que encontrarle el lado positivo a las cosas!-
* Caminar por la Rambla y el barrio Gótico
-Casual, pisando una obra de Miró!-
¿Otra de las virtudes de viajar con mujeres?
¡Las fotografías! Puedes tomar y pedir que te tomen cuantas quieras, ¡nos entendemos!📸😎
-Un poco del orgullo catalán-
-Como me encantan los callejoncitos del barrio gótico!-
*Caminar por la playa y comer patatas bravas con una Barcelonesa!
La mejor parte de este paseo playero fue que lo hicimos en compañía de una de mis mejores amigas, de hecho mi mejor amiga en Newcastle, la única, la inigualable, la irreverente: Patri!
Quien para variar había huido de Inglaterra para estar en un lugar mucho mejor, su casa, Barcelona! ¿Quién la puede culpar?
En fin, terminamos en un barecito muy pintoresco de un barrio cercano a la playa, comiendo diferentes especialidades de patatas con patatas en salsa de patatas, jajajajaja y bebiendo vermut -una bebida alcohólica que Patri recomendó mucho, pero que para ser honesta, no me gustó ni un poco-.
Sonrisas a prueba de clima ;)
La primer ciudad del itinerario no había sido fácil de conquistar, pero al final vencimos, terminamos corriendo para alcanzar el trasporte hacia el siguiente destino con una sonrisa en la cara y con muy buenos recuerdos⭐
¡Hasta la siguiente aventura!
Marilú, Pau y Pris
-Ah, finalmente se me hizo entrar a Santa María del Pi y visitar la Catedral de Barcelona, aunque a esta última le dedico su propia entrada-
Comentarios
Publicar un comentario
¿Qué te parece?